Por José Ángel Borrero Fernández.
Su ilusión, de las mayores que existen en la vida de aquellos que amamos nuestro pueblo, fue la que José Borrero Chaparro cumplió el pasado Domingo de Resurrección al pregonar la Romería en Honor y Gloria de la Santísima Virgen de la Coronada, Patrona de Calañas.
Su ilusión, de las mayores que existen en la vida de aquellos que amamos nuestro pueblo, fue la que José Borrero Chaparro cumplió el pasado Domingo de Resurrección al pregonar la Romería en Honor y Gloria de la Santísima Virgen de la Coronada, Patrona de Calañas.
Cada persona lleva su pregón, su forma de expresarlo, de vivirlo y el pregonero fue transmitiéndolo desde el atril de Santa María de Gracia partiendo de una reflexión sobre la sociedad en la que nos encontramos donde cuestionaba qué papel debemos cumplir cada uno según nuestra Fe adquirida como calañeses. A continuación, tras la Salve hecha oración, describió los acontecimientos alrededor de su nombramiento como pregonero enlazándolos con la parte de agradecimientos en la que destacó a los miembros del cabildo que le acompañaron en su etapa de Hermano Mayor de la Hermandad. Con este reconocimiento dio paso a las vivencias de cada día que dedicamos a la Virgen de la Coronada a través de versos declamados desde la ternura y el cariño hacia nuestra Patrona y a Calañas. Con su expresividad denotaba un estado casi de levitación, sintiéndose como en su casa gracias al respeto y la atención que durante todo el acto le otorgaron todos los presentes en la iglesia.
Sin ninguna duda por las caras de satisfacción de todos, disfrutó e hizo disfrutar en este pregón que fue evolucionando de reflexión a canto hacia Calañas y a La Virgen de la Coronada colmándola de piropos llenos de emoción y culminado con este verso que utilizamos para finalizar el artículo:
Vida, Esperanza y Dulzura Calañesa.
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