Las elecciones Catalanas

Después de semanas de tiras y aflojas entre soberanistas y unionistas, entre independentistas catalanes y partidos nacionales, Cataluña  ha votado. La sensación finalmente es que nos hemos quedado casi como al principio, sin nada definitivo ni definido. 

"Junts pel sí", juntos por el sí, una amalgama ideológica de partidos de signo contrario y "rupturista", que se tiraban dardos hace unos meses, y que hoy, se aplaudían (ni oír hablar del  tres por ciento, ni da le gestión de Mas, todo por el sí), no ha logrado lo que aventuraba. El Sí a la independencia, aun sin una hoja de ruta clara. Puesto que los resultados de esta noche nada que tienen que ver con lo que auguraban "Un resultado demoledor". En número de votos, no llegan a la mitad más uno. Mal asunto cuando la legitimidad de una independencia unilateral no tiene el apoyo de la mayoría ciudadana. Amén, de la negación constitucional o del diálogo.

Ahí entra el otro lado del juego político, desde el No rotundo de los populares, sin intención de conversación alguna, a las apuestas del federalismo socialista o el derecho a decidir de Podemos. Ciudadanos con una apuesta nacional clara, pero una mejor lectura del problema catalán, casi ha triplicado los escaños con respecto a las últimas elecciones. Los de Rivera según su líder "apuestan por mejorar la gestión y sacar a los corruptos de las instituciones, y por hacer una política para los Españoles y los Catalanes". 

El resultado electoral es tan poco contundente que a día de hoy los vencedores no tienen ni tan siquiera candidato, y La CUP, anticapitalistas rechazan la idea de ver a Mas como presidente, lo que podría suponer una fractura interna en la candidatura en Junts pel Si, y entre los independentistas. Todo demasiado extrambótico.

Lo único claro es que Cataluña está cada vez más fragmentada en torno a una idea utópica de una independencia de España, que algunos aventuran como fácil y paradisíaca, otros como temible e infernal. Difícil será llegar a algún punto de acuerdo razonable sin propuestas.